PASTAMORE, ENAMORA CON SUS POSTRES
Rodolfo Plass nos abre el apetito con sus crónicas gastronómicas. Esta vez visitó el restaurante italiano de Vitacura con un servicio muy, muy, amable, pero…
Hace 4 años aproximadamente había estado en @Pastamorespa y me fui con una muy buena impresión. De hecho, tenía muchas ganas de volver y el fin de semana pasado tuve la oportunidad de ir. Esta vez, con un ojo más crítico.
Pastamore se caracteriza por una atención muy, muy, amable. Desde que llamé hasta que me fui, el trato recibido fue muy agradable, especialmente de parte de Carolina (la menciono porque fue fundamental en la experiencia).
Al llegar, nos recibieron con un rico pan y aceite de oliva, como se estila en estos restaurantes. De fondo, sonaba un deep house a un volumen agradable. La verdad me esperaba algo más italiano.
Partimos con un antipasto ($12.000), que consistía en un tomate asado, pesto de albahaca, burrata fresca y alcaparras fritas, que le faltaba un poco desabor pero con el pancito se arregló un poco.
De plato principal, Gnocchi Caprese (gnocchi de papa con salsa de tomate fresco, albahaca y mozarella. $12.600) y Tagliolini alla Busara (tallarines caseros, camarones, perejil, albahaca, salsa de tomate y aceite de oliva. $13.600). Ambos en el papel sonaban muy bien. Lo cierto es que no estaban malos, muy por el contrario estaban correctísimos, pero esperaba que fueran una explosión de sabores y no fueron el caso.
Casualmente, en el almuerzo de ese día en mi casa había comido pasta con una salsa receta de @caropinochetq (tiene un reel en instagram) que aún sin tener carne ni aliños sofisticados, estaba mil veces más sabrosa.
En cuanto a los vinos, por copa tienen de varias cepas de la Viña Veramonte. Y es aquí donde flaquea un poco la experiencia. Si quieres una botella de vino, no tienen una carta. Tienes que pararte de la mesa e ir en compañía del garzón a una pequeña cava donde tienen principalmente vinos de la Viña Veramonte, de otras viñas comerciales y algunos italianos. Lo precios no están a la vista y por cada vino que preguntas el garzón va y le pregunta a otra persona el precio (muy mal sistema). Van desde los $16.900 hasta los $150.000.
Cómo no había carta de tragos, hasta que no me llegó la cuenta no supe cuánto costó el Aperol Sprits ($6.500) ni la copa de vino ($5.000).
Punto aparte… los postres: Tartaletta di Nutella ($4.900) y Tiramisú ($5.900), fueron una maravilla. Volvería sólo por ellos.
(Dos estrellas de tres) Vale la pena desviarse del camino para pasar.
¿Volvería? La verdad es que no quedé con ganas de volver, la oferta gastronómica es tan grande que prefería probar otros lados.
Pastamore:
Horarios: De Lunes a sábado: almuerzo y cena
Teléfono: 228862236 y +569 51595923
Dirección: Las Tranqueras 1471, Vitacura. Stgo.
Rodolfo Plass Larraín (@rodofodie) es amante de los placeres gastronómicos, de familia con tradición cocinera y obsesionado por los momentos perfectos. Escribe críticas con el ojo del ciudadano común que aprecia la buena comida. Desde un restaurante de lujo hasta un puesto de comida callejera, para él lo fundamental es que haya sabor, intención, respeto por los alimentos y las personas. Hace un año se aventuró con su perfil de Instagram @rodofoodie, donde ha podido expresar su anhelo por compartir con otros y hacer comunidad en torno a los placeres de la vida.
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