«BOTTLE SHOCK» BAJO LA LUPA DE SU AUTÉNTICO PROTAGONISTA
Maximiliano Mills, nuestro columnista de película, se despide del gran Steven Spurrier, cuando se cumple un mes de su partida, con la reseña de un documento fantástico realizado de tú a tú por el director de la trilogía «Somm».
Cuando supe que existía ¡casi me fui de espaldas! Recrear la película «Bottle Shock» con el mismísimo Steven Spurrier viéndola en tiempo real —por segunda vez en su vida desde su estreno hace 14 años— y además, junto a Jason Wise, el respetado director de la trilogía de documentales del vino «Somm«… Wow ¡Sería como sentarse a ver la película «Ciudadano Kane» con William Randolph Hearst! O el equivalente de hoy a ingresar al cine privado que tenía dentro de su mansión Howard Hughes y ver junto a él la película «El Aviador»… Incluso, quizás, impensable en estos momentos, pero dentro de unos años más, podría darse la ocasión que el mismo Jason Wise viera el documental «Sour Grapes» junto a Rudy Kurniawan (el mayor falsificador de vinos de alta gama en la historia de Estados Unidos).
Creo que esta va a ser mi primera no-columna de cine. Porque esta no es una película; no es un documental. Esto es algo entre un legado y una cápsula de tiempo. Como esas que se entierran por todas partes con objetos del Siglo XX para que se abran en 100, 200 o 300 años más. Es un regalo para las futuras generaciones de viñateros, enólogos, viticultores, sommeliers y de todo enófilo que venera el vino.
A mí me estremece sólo pensar que exista y la considero una bendición. La vi casi a un mes del fallecimiento de Steven Spurrier; y verlo en pantalla, tan cercano. No poder creer que se haya ido. Emociona de verdad. Hay que irse acostumbrando a la idea de que este mundo ha perdido a su mayor apóstol del vino.
El año 2008 cuando leí detalles de la pre y post producción de «Bottle Shock» me llamó la atención saber que la película no había sido aprobada por Steven Spurrier. En este documento de Wise, cuenta y se explaya en todas las razones que tuvo para ello: como saber que Jim Barret —dueño de «Chateau Montelena»— le entregó un cheque por un millón de dólares a la compañía productora para que sólo su vino fuera el protagonista de la película. O para su sorpresa, enterarse que los productores en Hollywood no sabían que el señor Spurrier todavía estaba vivo. Y, conocer que lo que más incomodó a Spurrier, fue que el actor que lo interpretó, Alan Rickman, tuviera 63 años mientras él tenía solo 34 años cuando organizo la «Cata de París». Así, se entiende porque muchas veces la adaptación al cine de una historia o de una novela no es aprobada por el autor o por los verdaderos personajes interpretados en la película.
Una recomendación importante para disfrutar más de esta experiencia fílmica-histórica es informarse antes de quienes fueron sus principales protagonistas, como: Jim Barret, Patricia Gallaher y Aubert de Villaine. Mención importante realiza Spurrier sobre Eduardo Chadwick, cuando relata como esta plantilla modelo para catar a ciegas utilizada el año 1976 en París, ha podido continuar siendo utilizada por él para la «Cata de Berlín» realizada el año 2004.
La parte final de la película «Bottle Shock» es quizás la que más decepcionó a Spurrier, porque como él cuenta, «la recreación final de la ‘Cata de París’ no fue en las ruinas de un monasterio abandonado en las afueras de la capital francesa. Además, la verdadera cata no tuvo público, no asistió la prensa, tampoco estaba presente Bo Barret. Fue desarrollada en un salón del hotel Continental en París, el que se consiguió prestado con un amigo que trabajaba ahí. Ello explica, porqué el salón estuviera disponible sólo en el horario de 15:30 a 18:30 horas. Después había un matrimonio.
Lo que el público ve en la película, es casi la ejecución de una obra teatral, dijo Spurrier. En cambio, la verdadera ‘Cata de París’ fue muy seria, solemne y en silencio. Él cuenta a Wise: «Se sirvieron las copas, se cataron, se puntuaron los vinos, recogí las notas técnicas de los jueces y dije los nombres de los tres primeros vinos ganadores por categoría. Los nueve jueces se despidieron y procedieron a retirarse. Yo estuve en mi casa a las 19:30, justo a tiempo para narrarles un cuento para dormir a mis hijos».
En la realidad, Steven y, su señora Bella, no sabían ese día lo que habían hecho; ni lo que habían creado. Tampoco imaginaban, todo lo negativo que se venía en el futuro inmediato, como represalia de los productores de vino en Francia. ¡Qué paradoja! Spurrier nunca quiso derrotar o humillar a los mejores vinos franceses en su capital. La motivación para realizar el «Juicio de París» fue una sola: dar a conocer en Europa los vinos de California.
Para disfrutar completamente esta experiencia visual-personal con Jason Wise, el director de la trilogía de documentales «Somm» y Steven Spurrier, donde se ven principalmente como dos amigos, que a pesar de su diferencia de edad son contemporáneos, se estiman y admiran mutuamente, es un deber hacerlo junto a una copa de vino!
Como reflexión final hay que decir: Steven Spurrier puede no estar contento con la manera histórica en que aparece retratado en «Bottle Shock. Le tomó bastante tiempo aceptarla y sólo la vio en DVD un año después de su estreno. Pero sí hay que admitir el análisis atemporal realizado en cámara por su esposa, Bella: «Es una película entretenida, didáctica, con humor y hay que reconocer que… ¿Cuántas, miles, quizás millones de personas nunca se hubieran interesado más profundamente en el mundo del vino —entre los que me incluyo— si no hubieran visto la película ‘Bottle Shock'»?
Al escribir este comentario de cine para WiP se cumple justo un mes de la partida de Steven Spurrier desde esta dimensión. Este es mi homenaje para la vida y obra de alguien con quien me hubiera encantado haber alzado una copa de vino y brindar por sus 8.000 años de historia… Salud Mr. Spurrier!
«Bottle Shock Live Watch junto al real Steven Spurrier» es una producción de @SOMMT_Streaming estaba programa para junio 2021, pero debido al fallecimiento de su protagonista, está en streaming desde el 20 de marzo. Para verla hay que suscribirse al canal. Aquí pueden ver un abreboca.
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