Con Viña Concha y Toro a la cabeza de la iniciativa, y el objetivo de cumplir las nuevas metas sugeridas por la ciencia climática, el proyecto fue presentado por Wines of Chile. Aurelio Montes, su presidente, destacó que Chile sería el primer país vitivinícola en asumir este compromiso.

Este jueves 22 de octubre la asociación gremial Wines of Chile reunió on-line a todo el sector vitivinícola nacional para anunciar el nuevo proyecto de su Consorcio I+D en busca de reducir su huella de carbono. En el encuentro se destacó la importancia de que cada empresa logre medir su huella y  para así comprometerse a reducirla basándose en las nuevas sugerencias de la ciencia climática, la cual estima mayor urgencia que el Acuerdo de París, y alineado con el Acuerdo COP21.

«La Sustentabilidad ya es uno de los pilares la Estrategia de la Asociación Vinos de Chile, y ya medíamos la huella de carbono, lo novedoso es tener de ahora en adelante una metodología determinada que permitirá asumir compromisos para reducirla. Ningún otro gremio a nivel internacional lo ha hecho, y queremos dar ese primer paso”. Con estas palabras dio inicio Aurelio Montes, Presidente de Wines of Chile/Vinos de Chile, el lanzamiento de este nuevo proyecto que busca sumar a todo el sector vitivinícola del 4to país exportador de vinos del mundo.  Montes destacó destacó a su vez que el calentamiento global es un problema ante el cual no podemos quedar indiferentes. «Cuidemos nuestros bosques, cuidemos nuestra fauna, limpiemos nuestros océanos, incentivemos el uso de energía renovable. La innovación es importante es todos los sectores, y especialmente en el agroalimentario», dijo.

Aurelio Montes, también presidente de Viña Montes, aprovechó la instancia para destacar el interés de la asociación  Wines of Chile, mayor agrupación germinal del sector, por profundizar su relación con otros gremios y la colaboración que han venido desarrollando en mesas de trabajo nacionales  internacionales.

Michelle Senerman, gerente general de la consultora EDGE Chile, fue la responsable de explicar los objetivos del proyecto que liderará su empresa; entre ellos, permitir a Chile aumentar su credibilidad en relación a su compromiso por la sustentabilidad. Confirmando así a este país  como el primero a nivel internacional, que establecerá metas basadas en la ciencia climática internacional para la reducción de su huella de carbono como sector.

“El proyecto, resumió Senerman, busca evaluar las posibilidades de cada empresa para dibujar la línea de su disminución de emisiones de carbono, además de evaluar el costo para lograrlo, para que sea factible en términos técnicos y económicos». El proceso de la medición de emisiones inicial de la huella, explicó, tiene una duración en cada empresa de 11 meses.

…a la fecha, y después de un año de trabajo, en coordinación con el Consorcio I+D de Wines of Chile, se ha logrado sumar a este proyecto 11 viñas más. Las cuales representa el 50% de las exportaciones del vino chileno embotellado.

Senerman explicó que si bien en Australia, origen de EDGE, hay bodegas que ya trabajan con esta metodología no lo hacen como parte de una iniciativa asociativa país. Con esta metodología, agregó, ya existen trabajando en Latinoamérica 44 empresas, 4 de ellas en Chile con metas  ya establecidas, en entre ellas Viña Concho y Toro. Allí, la razón por la cual esta bodega (la más grande Chile y de las mayores en tamaño del mundo) se ha posicionado naturalmente como líder del proyecto de reducción de huella de carbono en el sector vitivinícola chileno. Además, a la fecha, y después de un año de trabajo, en coordinación con el Consorcio I+D de Wines of Chile, se han logrado sumar a este proyecto 11 viñas más. Las cuales representa el 50% de las exportaciones del vino chileno embotellado.

Para explicar el trabajo que ha venido haciendo en esta dirección desde el año 2018 la Viña Concha y Toro, Valentina Lira, su subgerente de desarrollo sustentable, tuvo un rol estelar durante la presentación on-line del proyecto este jueves. Lira, explicó que si bien venían midiendo su huella de carbono desde el año 2012, en  2018 se plantearon cómo hacer algo concreto para reducirla y que no estuviera fuera de su alcance. En este camino EDGE les ofrecía la seguridad de tener un impacto real en su compromiso. Fue debido a que la metodología para el sector vitivinícola no estaba establecida, que el proceso fue más largo. “El proceso fue más lento, pero el camino se abrió, lo que hicimos en conjunto ahora quedará como la metodología para las demás empresas”, dijo Lira.

«Ese medio grado menos que nos exige la ciencia climática hoy, dijo Lira, significó adelantar en 10 años nuestros objetivos».

Durante estos dos años de trabajo, a su vez, explicó Lira, las sugerencias de las ciencias climáticas, les llevó a replantearse un mayor compromiso para acelerar la disminución de su huella de carbono y redibujar su línea de compromiso. Dejando a un lado las estimaciones del Acuerdo de París, el cual compromete a los países a que no debe aumentar más 2°C la temperatura del planeta para 2100. Ese medio grado menos que nos exige la ciencia climática hoy, dijo Lira, significó adelantar en 10 años nuestros objetivos. Ese medio grado más de urgencia, es al que Chile vitivinícola se quiere sumar.

Lira destacó: “Debemos ser conscientes de que este trabajo va a generar costos y también beneficios, para la empresa y para el sector, pero es algo que no podemos dejar fuera de nuestra agenda. Es un compromiso que todos tenemos que ir generando».

En estos años, detalló Lira, Viña Concha y Toro se ha enfocado en reducir su huella de carbono mediante la descarbonización de su matriz energética, lo que implica el traspaso de combustible fósil a energías renovables. Lo que han logrado a través de 16 plantas solares instaladas de Norte a Sur del territorio. Mediante contratos de compra e implementación, hoy la empresa explicó,  ya está abasteciendo sus operación en un 80% con energías renovables.

Para explicar la base científica climática que sustenta el proyecto, Paola Delgado (Gerente de Investigación en la Iniciativa Science Based Targets) intervino en la presentación on-line, destacando que los países y sus empresas deben ir en línea con los objetivos de la ciencia. Pues apenas 0,5 grados Celsius más tiene severos efectos en los ecosistemas del planeta. A su vez mencionó que a pesar de los costos de implementación, cerca de 150 empresas en el mundo durante COVID-19 se sumaron a iniciativas en esta dirección. La necesidad de cambio, dijo, está haciendo sentido.

Delgado también especificó que Science Based Targets no ayuda a medir, sino que ofrece la metodología para calcular la huella de carbono de cada empresa, e invitó otros a sumarse a las 12 viñas chilenas que ya son parte de proyecto para estar dentro del top 10 de países verdes y así lanzar un importante mensaje al sector. Delgado fue enfática: “Ahora más que nunca es importante la colaboración, y no perder tiempo, aprovechar de la experiencia de sus colegas y el camino recorrido… La última década fue la más caliente en comparación con otras épocas, y el nivel de CO2 es el más alto que hemos visto en la historia de la humanidad”.

Durante la sesión de preguntas y respuestas se explicó que el costo de implementar la metodología EDGE de medición es más costosa en empresas pequeñas, y que si bien aún no se ha medido si el consumidor valora la medición de la huella de carbono al momento de decidir su compra, las grandes cadenas compradoras sí lo hacen y cada vez son más exigentes en esta dirección con sus proveedores.

En conversación con WIP.cl gerente del Consorcio I+D Patricio Parra destacó que el Proyecto Huella de Carbono busca ser sectorial para sumar la mayor cantidad de bodegas de Chile y reducir las barreras para ser parte a las empresas más pequeñas. Parra explicó que en este sentido, si bien cada empresa que forma parte del proyecto que coordina Wines of Chile de la mano de EDGE, deberá cubrir los costos de la metodología para medir su huella de carbono, del trabajo que se vaya realizando se va a ir generando mucha información sobre lo que se puede hacer. «Este lanzamiento, dijo, es justamente para motivarlos a que vayan en esa dirección». Por ello, agregó, hay una política abierta, para que se sumen bodegas que no pertenecen a Wines of Chile, tal como ha ocurrido con el Código de Sustentabilidad. “Alguien tenía que partir, queremos motivar a un sector completo, para tener un país más sustentable. Es una responsabilidad ética con el planeta que debemos compartir todos.

«…Esperamos que todos se sumen, porque la gente afuera no le interesa que sea una asociación la que lo haga, sino Chile. La idea es compartir las prácticas, porque no es sólo cuestión de cálculo,  sino que hay que hacer algo. Esta metodología, en este sentido, permite que cada viña se podrá comprometer en la medida de sus necesidades y posibilidades».

Parra explicó que como complemento al Código de Sustentabilidad, quisieron saber qué tan bien parada estaba la industria vitivinícola en Chile y se encontraron por un lado con empresas que ya estaban midiendo su huella, pero el proceso no estaba estandarizado. «La meta, aclara, es que más viñas se sumaran este año, pero fue un año complicado. Aun así, después de un año de trabajo sumamos 12 bodegas. Esperamos que todos se sumen, porque la gente afuera no les interesa que sea una asociación la que lo haga, sino Chile. La idea es compartir las prácticas, porque no es sólo cuestión de cálculo, sino que hay que hacer algo. Esta metodología, en este sentido, permite que cada viña se podrá comprometer en la medida de sus necesidades y posibilidades».

Parra nos recuerda que en el año 2011 dieron inicio al Código de Sustentabilidad con apenas 11 viñas, y que hoy ya son 76; lo que representa el 80% del vino embotellado de Chile. Además 70 bodegas conforman el Consorcio I+D 70.

Las 12 viñas que ya son parte del Proyecto Huella de Carbono son: Viña Aresti, Los Vascos, Haras de Pirque, VSPT, Viña Montes, Emiliana, Requingua, La Rosa, Cono Sur, Santa Rita, Vía Wine y Concha y Toro.

«El punto de unión entre ambas iniciativas, explicó Parra, es que queremos reforzar la métrica del Código de Sustentabilidad, e incorporar parámetros dentro del código para que más viñas sigan el camino de medir y reducir su huella de carbono. Estoy convencido de que llegaremos a números similares en menos tiempo. Es un tema muy actual y genera a la gestión de la empresa otros beneficios».

La huella de carbono se define como el conjunto de emisiones de gases de efecto invernadero producidas, directa o indirectamente, por personas, organizaciones, productos, eventos o regiones geográficas, en términos de CO₂ equivalentes, y sirve como una útil herramienta de gestión para conocer las conductas o acciones que están contribuyendo a aumentar nuestras emisiones, cómo podemos mejorarlas y realizar un uso más eficiente de los recursos. Fuente Ministerio del Medio Ambiente.

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