QUÉ NOS DEJA 2023
Repasamos un año muy complicado para el mundo del vino por donde se mire; el que nos deja grandes retos para 2024, también algunas buenas nuevas.
LO MALO.
No podía haber empezado peor 2023. Calor, mucho pasto entre hileas, viento seco… los incendios forestales no se hicieron esperar. Llegaron a fines de enero principalmente en Itata, Biobío y Maule, donde volvieron a quedar bajo las llamas bosques, casas, viñedos y bodegas. También, las uvas que ya pintaban pero aún no se cosechaban quedaron marcadas por el humo. No es la primera vez que pasa, tampoco será la última (recordemos el 99.9% de los incendios son provocados por el hombre). Peor, lamentablemente, fue para quienes habían comenzado algunos años atrás a manejar sus viñedos sin herbicidas, preocupados por re-generar la vida en sus suelos. Más pasto, más combustible. El gran reto será cómo no abandonar esta misión sin el peligro que conlleva. Significará, sin duda, más trabajo, justo cuando los precios de las uvas no se han levantado, por el contrario, cómo vamos, volveremos a ver uvas sin cosechar en viñedos este 2024.
Otro reto, ¿cómo detener y castigar a los pirómanos? Lo conversé con mi hermano, quien vive en Mallorca, una isla llena de pinos autóctonos, es decir, nativos. ¿Tienen incendios, es tema? «Por supuesto, me dijo, nadie puede entrar a parques con fósforos. Los controles y las penas son altísimas, no es juego. Antes había incendios todos los años, ya no». También pregunté a viñateros en Sierra de Gredos, donde las llamas de un accidente automovilístico acabaron el año pasado con miles de hectáreas. Lo que pasó entendí fue «burocracia» entre bomberos rurales y bomberos urbanos. Así es, los bosques no tienen la culpa.
Otra realidad, que nadie quiere mencionar, con baja en las exportaciones (llegamos a -33% en volumen y de -32% en valor durante agosto 2023) y baja en el consumo (sin cifras oficiales), sumado a precios de uvas tintas para cosecha 2024 por el piso (tampoco con cifras oficiales). ¿Habrá que arrancar aún más viñedos? El recién publicado Catastro SAG 2022 muestra 7.000 hectáreas menos en los últimos tres años de su registro (2020-2022). No nos gusta la idea, ¿a quién le gustaría? Menos, que los viñedos centenarios, en secano, sin portainjertos, con bajos rendimientos naturales, queden en la lista de arranque. Cómo les damos valor, seguirá siendo el gran reto para 2024.
Mientras las exportaciones no dejaban de mostrar signos de alerta hacia la baja, llegó El Niño. Lo habían anunciado; así como está anunciado que hasta abril del 2024 podría seguir manifestándose. Las lluvias torrenciales, las crecidas de ríos y quebradas, golpearon una y dos veces. Primero, en junio 2023, luego dos meses después, en agosto. Las zonas más afectadas con inundaciones en viñedos fueron: el Maule profundo; Curicó costa, Licantén; Apalta en Colchagua Entre Cordilleras… lo que supimos. El nuevo reto será no olvidar la memoria del agua. No construir pensando que ya no lloverá igual que antaño, sino subir incluso más arriba la marca para nuevos proyectos. También, no olvidar, que los viñedos centenarios son parte de la historia, y que si siguen donde están, es por algo. Los frágiles somos nosotros. Porque mientras llorábamos por las lluvias derramadas – y que se iban a parar al mar, queríamos alegrarnos por el agua caída nos aseguraría las reservas de vida, y del vino por un par de años más.
LO APRENDIDO SOBRE DONACIONES. Otra de las lecciones aprendidas de ambas catástrofes (incendios y lluvias) es que si queremos apoyar a los que más lo necesitan, la ayuda debe ser directo a beneficiarios. Por ejemplo, aún no hemos sabido que se hayan comenzado a distribuir los $40.000 millones de pesos que se entregaron a Desafío Chile, recaudados por la campaña Juntos por el vino. Hace un mes atrás, cuando fuimos a visitar a los más afectados, no tenían aún noticias de cuándo llegaría la ayuda. Recién entonces les habían llamado para saber qué daños habían tenido por los incendios. Pero si ya había un catastro realizado por los mismos enólogos que trabajan para las municipalidades del Itata, a un mes de ocurrido el desastre mayor en Leonera/Guarilihue.
Por el contrario, las iniciativas más pequeñas, fueron las más expeditas en entregar su ayuda directa. Inaceptable esta lentitud en busca de evitar errores en la entrega, aunque por supuesto se agradece la intención. ¿Qué se supone debieron estar haciendo durante estos meses los afectados?
Entre tanto, hablando de demoras innecesarias, todavía no hay novedades sobre la supuesta nueva categoría Pipeño decretada desde el SAG (recordar aquí más detalles). El mayor error del año. Sí supimos que los gremios se manifestaron. También que desde Guarilihue, la agrupación Travesía del Pipeño ya hizo su primer vino 2023; deben lanzarlo lo antes posible para dejar libres los estanques para recibir la cosecha 2024 que está en puerta. Ansiosos lo estamos esperando.
En cuanto a las exportaciones, no pudo explicar mejor la situación el nuevo presidente de Vinos de Chile, Alfonso Undurraga, para La Segunda:
«Terminaremos el año con una disminución en las exportaciones en su volumen de un 20%. Esto equivale a más de dos meses de una baja de ventas donde las mayores afectadas han sido las viñas grandes. Eso a su vez paraliza todo. Porque estas viñas compran vinos, uvas, generan negocio y eso afecta muy fuerte a toda la cadena vitivinícola.
El mejor ejemplo es que yo llevo un poco más de 30 años en el negocio del vino, desde el año 92, y durante esa época nunca hubo un año con una caída mayor de exportaciones a dos dígitos. Mientras que este 2023 fue de alrededor de un 20%. A eso súmale que el 70% de nuestra industria es de exportaciones. Entonces, es un desplome brutal. Este 2023 ha sido el peor año del vino chileno para nuestra industria en las últimas tres décadas; tanto desde las exportaciones como para nuestro mercado interno que se contrajo en los vinos más económicos. Esperemos que esto pase y no sea un derrumbe mayor».
EL REAL RETO DE LOS 100 PUNTOS. Quienes nos conocen, saben que no nos interesa esta manera de hablar de los vinos. Lo relevante que vemos en los dos primeros 100 puntos que el escritor de vinos chileno Patricio Tapia, le dio a dos vinos, ambos de la Argentina (Malbec de las bodegas Catena y Zuccardi) no es que deja de este lado de la cordillera, recelo. Sino un mensaje claro: Los vinos no son los que obtienen los 100 puntos, son los proyectos detrás. Lo diría Tapia en una entrevista para un medio argentino: . “Son 100 puntos que le doy a los vinos pero también hay detrás de ellos un trabajo sostenido, una historia, una personalidad y un gran año como fue la cosecha 2021”.
Después de haber dicho alguna vez, que no daba 100 puntos porque no había vinos perfectos, desde WiP creemos en la idea de que los vinos no son los perfectos si de puntajes se trata, los perfectos son los proyectos detrás. Eso es cuando los dueños están involucrados de pe a pa, hay inversión en experimentación, en estudios de suelos detallados, de geología, de material vegetal, de climas, de vinificación llevada a los extremos. Vemos el compromiso de sus dueños junto con todo su equipo de llevar sus vinos a otro nivel. Es la cultura de ser los mejores, o mejor dicho de la excelencia. Es hora de que vayamos a por ella, en todo lo que podemos y debemos: desde el viñedo hasta la mesa de nuestros turistas. Y aquí incluyo los restaurantes, excluidos de la llegada de la Guía Michelin a América del Sur, por…
¿Cuál es el gran reto con tu restaurante, le preguntaba Pamela Villagra a Mauricio Fredes, dueño de La Calma, en una entrevista para www.7canibales.cl este mismo mes. A lo que respondía Fredes: «… El norte puede ser tener el mejor restaurante de pescados y mariscos de América, y eso no es por querer serlo, sino porque los productos del mar que tiene Chile son inigualables, los mejores del continente”.
Qué proyecto en Chile vitivinícola tiene hoy tal profundidad de reto e inversión con foco en nuestras variedades emblema (Carmenere y Cabernet Sauvignon? Creo que lo más cercano es De Martino con su nuevo Cabernet Sauvignon Cuvé, de la mano de Rodrigo Laytte, de quien pronto publicaremos entrevista. -Atentos, por cierto, al nombre de este destacado chileno, radicado en Burdeos, asesor en vinos de alta gama, desde el suelo a la botella-. ¿Viñedos Chadwick? el Cabernet chileno nacido en Puente Alto, el que más 100 puntos debe sumar hasta ahora de Chile? No me cabe duda que serán parte de los retos de Emily Faulconer, junto a la nueva generación de la familia Errázuriz. Sabemos además del gran trabajo de Don Melchor, ahora sumergidos en la tarea de darle vida a sus suelos; un trabajo detallado, extraordinario, que ha liderado Enrique Tirado, y cuya diversidad de cuarteles / componentes utiliza para darle calidad año a año a unas 17 mil cajas de producción, según metas del 2020. Qué pasaría si dieran ese paso, de separar, separar y separar, para llegar «al vino». Sabemos que a Concha y Toro no le interesa si no hay volumen de ventas. Es su modelo de negocios. Exitoso en lo rentable, por cierto. Además, un experto norteamericano ya le dio los 100 puntos. Sabemos hay varios proyectos buscando la excelencia tímidamente, falta dar el gran paso.
LO BUENO.
EL AÑO EN QUE ITATA SE INTERNACIONALIZÓ. Nos cuesta creer hoy, tal como dice la nueva edición del Oxford Companion to Wine, que el boom o renacer del Itata (antiguo valle vitivinícola de Chile) comenzó recién con el primer Cinsault de Viña De Martino, el 2011. ¿Cuántas cosas han pasado en Itata estas últimas dos décadas? Más allá de las malas noticias (incendios y precios por el piso), este año fue el año de su definitiva internacionalización. Vimos a sus pequeños viñateros recorriendo Europa América, con varias giras, no solo una al año, y no únicamente en ferias de vinos y/o visitando distribuidores, también los vinos en la feria de vinos a granel más grande del mundo. Y vimos a las viñas tradicionales, mostrando sus vinos en seminarios para profesionales del vino en el extranjero. También, vinos a sus viñateras mostrando sus vinos en UK, Irlanda y Países Bajos. Que el empujón de la mano de los Gobiernos de turno no se detenga. No olvidemos que siempre las D.O. son marcas que requieren trabajo a plazos indefinidos. Quienes representan a los más de 6.000 productores de la zona seguirán pidiendo / reclamando por que todos tengan los mismos beneficios, un sueño de todos, imposible. Lo que se debe entender es que la D.O. es una marca y que si se hace bien su promoción los arrastrará a todos hacia arriba.
EL AÑO DE LA GARNACHA. A mitad de año quisimos hacer una cata de Garnachas, todavía estamos recopilando las etiquetas, aquí seguro nos faltarán… Las más de 36 que contamos, nacen a partir de 235 hectáreas de viñedos según nuevo Catastro 2022; versus las apenas 49 hectáreas que había de Garnachas en Chile en el 2010. Las vemos, ya sea en mezclas: como las de Montes, Ventisquero, Bodegas Re, Undurraga, Erasmo, Tres Monos, Terranoble, Veramonte, Valdivieso, Viu Manent, Sutil, Antiyal, Wildmakers, La Despensa, Emiliana, La Kura, Garage Wine Co.) O en solitario, como las de: Huaso de Sauzal, Matetic, La Despensa, Koyle, Pérez Cruz, Schwaderer, Alcohuaz, P.S. García, Juan Segura, Alchemy, Masintin, Castamora, Attilio & Mochi, Casa Marín, Orígenes, Viña del Señor, Cremaschi Furloti, JVC y Maturana ) sin contar las del Valle del Huasco (3 Quebradas, J.P. Martin, Kunza y Buena Esperanza), las que han sido además, debido a su carácter vibrante, un gran hit del valle Revelación del Año.
EL AÑO QUE CONSOLIDÓ AL VALLE DEL HUASCO COMO D.O. Ventisquero y Armidita, con su Pajarete, han sido el gran motor del valle, aunque el primero -de mayor trascendencia internacional por el carácter de sus vinos de cepas internacionales- aún no tiene bodega propia en este el valle nortino, costero, de suelos calcáreos. Por eso,,, la importancia de que este año el valle se haya consolidado como D.O. con la aparición en sociedad de varios nuevos proyectos nacidos y embotellados en origen. El año pasado había sido viña Buena Esperanza, la que sorprendió con sus Chardonnay; este año se ha sumado de su viñedo J.P.Martín; y también, las viñas 3 Quebradas y Kunza. Destacable además, que casi todas, están lideradas por mujeres (Mai-Nie Chang es socia de Buena Esperanza, las hermanas Camila y Carla Rojas lo son en 3Quebradas y Loreto González en Kunza). A ellas, heroínas del Norte Grande, las vinculamos con nuestro siguiente destacado del año. Antes, una mención especial a Viviana Navarrete, líder del equipo de Viña Leyda, por un extraordinario trabajo, del viñedo a la bodega, en busca de la excelencia, destacando con la cepa Pinot Noir.
EL AÑO CUANDO LAS MUJERES TOMARON EL LIDERAZGO. Como nunca antes este año vimos a mujeres del vino liderando. Parecía imposible, pero este año vimos por primera vez llegar a la presidencia de la Cofradía del Mérito Vitivinícola (de seguro, la agrupación con mayor cantidad de años de experiencia acumulada, dentro del vino chileno), a una Mujer, la agrónoma enóloga Carolina Arnello; quien fue además presidenta de ANIAE en el pasado. Además, en la presidencia de ANIE tenemos hoy a la joven y dinámica enóloga, Manuela Astaburuaga. Además, ANIAE destacó este año con su premio Al Mérito Vitivinícola 2023 a una gran profesora de tantas generaciones, Consuelo Cheppi. También, intentan liderar contra viento y marea hoy la Asociación de Sommeliers de Chile, Vivian Mosnaim y Fernanda Pérez. Y, en la dirección del primer Diplomado de Comunicaciones del Vino, creado para de la UNAB, tenemos a otra mujer, la periodista, cocinera y sommelier Claudia Gacitúa, quien además es fundadora de MUV. Agrupación que, por cierto, este año además renovó su compromiso con las mujeres del vino de Chile, eligiendo su directorio; cuya presidenta es la comunicadora y sommelier, residenciada en Colchagua, Cristina Álvarez González.
Además, la enóloga Emily Faulconer, asumió en la jefatura enológica de Errazuriz Family Vineyards; un puesto para el cual buscaban una mujer. Algo que para algunas no es motivo de celebración, sino parte de la tendencia woke. Pero caso que una mujer al mando sea visto al fin como un mérito, no es un mérito. ¿Por cuánto tiempo ha existido el requisito de ser hombre, sólo por el «mérito» de ser hombre? Y, cómo no, nos encanta ver cada vez más mujeres detrás de proyectos vitivinícolas, y no sólo en ventas, servicio o sus comunicaciones, sino como enólogas, dueñas y/o líderes de sus marcas y de sus territorios, por más pequeños que sean sus proyectos. Destacan Ana María Cumsille (bravo por seguir adelante además, como enóloga de Carmen), Andrea Jure de Mujer Andina, Marcela Chandía de ChileDivino, Laurence Real de L’Entremetteuse, las hermanas Prado de Viña Prado, las primas Katherine Concha de Viña Terruña y Clara Arteaga de La Kura Wines, Loreto Alarcón de Viña Mujeres, Patricia Gálvez de Viña Tinajas del Malandra, María Isabel Labra de Viña María Isabel, Lucía Torres de Viña Mirador del Valle… La lista ya es tan larga, que este año se realizaron sendas ferias de vinos, solo con vinos de ellas como protagonistas.
¿Qué nos falta? Creernos que podemos y entre nosotras, apoyarnos más y juzgarnos menos. Atentos al nuevo libro de la enóloga Eugenia Díaz, «Las 100 primeras» el cual estará a la venta en Amazon.com durante enero de 2024.
EL AÑO DE LAS FERIAS DE VINOS. No sabemos si ha sido las ganas de salir post pandemia, o la necesidad de generar negocios y difundir este mundo en medio de la crisis que vive la industria a nivel internacional. Lo que sea, ha hecho que este año hayamos tenido la mayor cantidad de ferias para wine lovers y público en general de la historia. ¿Qué nos hace falta? ¿Cuidar las fechas para no tener tantas un mismo fin de semana? ¿Es necesario, por qué en realidad somos siempre los mismos? Cómo llegar más lejos junto al vino de calidad, seguirá siendo el reto en 2024; no de ese producto que se vendo como vino dulce, y es bajo en grado, saborizado con esencias, y que ya nos da paliza, lamentablemente, en supermercados.
EL RETO DE LAS RRSS: Cómo lograr ser rentables seguirá siendo el reto 2024, de la mano de comunicar más y mejor. Cómo hacerlo informando, no desinformando, ¡educando! entreteniendo; cómo hacerlo de la mano de la IA. Estos son parte de los retos que nos dejan las redes sociales a los medios en su siempre desafiante incertidumbre. Porque antes los cambios, sea en el área que sea, de nada sirve llorar. Son los retos que también no deja a WiP.cl, cuando acabamos de cumplir nuestros siete primeros años haciendo lo que nunca nadie hasta ahora se atrevió: Prensa de Vinos Independiente sobre los Vinos de Chile. Porque así es: la prensa puede incomodar, porque no está para hacer relaciones públicas.
A todos quienes nos leen, y a toda esta gran familia del vino, que son muchas familias y muy diversas a la vez, les deseamos un mejor año 2024. Que superemos la adversidad, enfrentemos los retos unidos, y saquemos adelante un nuevo valor para los vinos de Chile.
Muy Feliz Fin de año 2023, Muy Feliz 2024.